martes, octubre 11

Márquetin, enología y registro fósil (9)

por Heraclio ASTUDILLO-POMBO. Universitat de Lleida


Uso del registro fósil, como emblema de ciertos vinos españoles (8ª parte)


Los vinos Turritela, tinto y rosado, de la bodega El Vinyer, de Tremp (Pallars Jussà, Lleida)


Introducción

En este blog, no se había vuelto a tratar sobre "paleontovinos" españoles, desde finales del 2013, a pesar de nuestro personal interés por este tema tan específico de la "paleontología cultural" europea, precisamente por el hecho de que hasta ahora resultaba ser un tema de muy escasa productividad en la "paleontología cultural" de nuestro país. El motivo de este largo intervalo de tiempo de silencio, tan prolongado como involuntario, no ha sido otro que la falta de información sobre la salida de algún nuevo producto vínico de esta categoría tan minoritaria en el mercado enológico hispano.

Además, cuando el responsable de que se produzca un hecho comercial tan insólito como infrecuente, es una bodega pequeña, de comarcas y joven, por lo tanto sin mucho renombre enológico, estará garantizada la falta de resonancia en los medios de comunicación de información generalista. Afortunadamente para la difusión de estos sucesos, existen las redes sociales e Internet, dónde los investigadores puede hacer prospección de datos o los productores de bodegas jóvenes y de zonas vinícolas que son poco populares, fuera de su entorno más próximo o más experto, hacer autopromoción y divulgación de sus nuevos vinos recién elaborados.

Mesa dispuesta para la cata del nuevo vino, junto a la entrada principal de la bodega El Vinyer, en la finca familiar de Figols de Tremp. 
Al fondo se pueden ver las hileras de vides y la izquierda, en primer término, dos botellas de vino, una de rosado y la otra de tinto, de la serie Turritela. Juanto a ellas hay un frasco de vidrio que contienen ejemplares de "turritelas" fósiles, recogidas en el suelo de las viñas y de sus inmediaciones.
Imagen: Extraída del FB de "El Vinyer"


Por fortuna para nuestra causa, de conocimiento y difusión de productos de categoría paleonto-enológica, en una de las revisiones que se realizan periódicamente en Internet, con la finalidad de descubrir novedades ignoradas, recientemente, se descubrió la aparición durante el año 2015 de dos nuevos "paleontovinos" españoles: el Turritela Negre 2014 y el Turritela Rosat 2014 producidos por la bodega El Vinyer. Una pequeña empresa vitivinícola catalana de carácter familiar dedicada al cultivo de la viña y a la elaboración de vinos, ubicada en una zona enológica no "habitual" y poco conocida que está impulsada y dirigida por la joven cosechera y enóloga Eva Carmona Bardella.
Se trata de dos novísimos vinos producido en Cataluña, en la provincia de Lleida, en una zona de montaña con una antigua tradición vitivinícola perdida a finales del siglo XIX, cuya producción se esfumó con la llegada de la plaga de la filoxera a España, terrible plaga de insectos chupadores que arrasó la mayoría de los viñedos de toda Cataluña. A diferencia de lo que pasó en otros muchos lugares de España y de Cataluña, esta zona catalana no se recuperaría nunca de la hecatombe generalizada del sector vitivinicola español. Esto fue debido a la dureza del laboreo bajo unas condiciones climáticas y una naturaleza del terreno que rendían cosechas poco productivas y unos vinos poco conocidos y reconocidos, debido al aislamiento geográfico y al alejamiento de los mercados de cierta importancia.

Los dos "paleonto-vinos" de "El Vinyer", como todos los demás vinos que se producen en la provincia de Lleida, pertenecen a la jovencísima e interesante Denominación de Origen "Costers del Segre" (Riveras del Segre).

Botellas de vino rosado y tinto de Turritela, fotografiadas en un lugar muy cercano a las viñas. A su alrededor, la superficie estéril de las margas grises aparece cuajada de incontables turritelas fósiles. La abundancia de ese tipo de caracolillas prehistóricas petrificadas, es la responsables de que estos dos vinos tengan un nombre de sonoridad italiana y con una innegable vinculación paleontológica con su "terroir"
Imagen: Cortesía de Eva Carmona


Los dos nuevos "vinos paleontológicos" recién descubiertos se llaman Turritela, no por casualidad o por capricho de la bodega, sino que ello es debido a la abundancia de fósiles de "turritelas" (torrecillas), en el suelo de sus viñas y en los terrenos de las cercanías. Las turritelas son un tipo de estilizadas caracolas marinas del Terciario (Eoceno), que se encuentran en el suelo margoso de las viñas y terrenos de sus inmediaciones, como fósiles casi exclusivos y monótonos. Fue precisamente este hecho paleontológico el que inspiró y motivó a la cosechera y enóloga Eva Carmona en la elección de tal nombre para el primer vino producido por la empresa. 
Este nuevo y primer vino, producido de forma moderna y rigurosa, está representado por dos variedades, una es un vino tinto y la otra un vino rosado. Ambos vinos creados a partir de uvas de la variedad "Merlot", cultivadas en las antiguas tierras familiares, antaño dedicadas al cultivo de viñedos de forma tradicional, situadas en el antiguo término de Figols de Tremp que hoy es un agregado del enorme municipio de Tremp, el más extenso de toda Cataluña.
Los dos nuevos vinos Turritela, mencionados, como todos los demás, producidos o en fase de producción, de la bodega El Vinyer han sido diseñados, controlados y producidos por la joven, cosechera y enóloga Eva Carmona Bardella, nativa de Tremp, capital de la comarca prepirinaica del Pallars Jussà pero con raíces familiares en el pequeño pueblecito de Figols.
En cuanto a la serie de vinos Turritela, negro y rosado, de momento, se desconoce si la bodega El Vinyer de Tremp, tiene proyectado ampliar la serie Turritela, incorporando 
en el futuro un vino blanco.


Un poco de historia antigua y moderna...


Historiadores y arqueólogos saben que el cultivo de la viña y la producción de vino en el Prepirineo leridano se remonta a la Edad Media y que diversos monasterios se dedicaron a ello en fechas hoy tan lejanas como el siglo XII, tras el retroceso de los ocupantes sarracenos y el avance de la reconquista cristiana.

Parece ser que el interés reciente por la recuperación de los antiguos "viñedos de altura" en la la zona de la Conca de Tremp, en la comarca del Pallars Jussà, se inicia hacia 1990 con la aparición, en diversas localidades de la Conca de Tremp, de algunos técnicos en viticultura de la potente empresa vitivinícola Torres, preocupada por rescatar viejas variedades que aportaran personalidad a sus vinos y por los efectos del Cambio Climático sobre las cosechas de uva vinificables. Visitaban los técnicos de Torres diversas localidades del Prepirineo catalán, con antigua historia vinícola y favorables para el futuro cultivo de ciertas variedades de "vides de altura". Entrevistaban viticultores y se interesaban por la recuperación de antiguas variedades locales de vides, con cuyas muestras una vez estudiadas, valoradas, seleccionadas y multiplicadas enriquecer las colecciones de los viveros de la empresa Torres. El hecho más determinante fue que Torres acabó adquiriendo terrenos aptos para constituir una gran finca vitícola en la solana del antiguo término de Gurp, con la idea de realizar ensayos prácticos sobre la hipótesis de que un proceso de maduración de las variedades de uvas cultivadas en aquella finca, en unas condiciones climatológicas más más frescas y una amplitud térmica más acusada, determinaría un crecimiento y maduración del fruto más lento dando como resultado mostos con menos azúcar y mayor acidez, les permitiría obtener vinos con menos alcohol y más aroma, más estables y longevos una vez embotellados.
En la finca de sant Miquel o de les Bordes de sant Miquel, en la solana del antiguo término del pueblecito de Gurp que actualmente es un agregado del municipio de Tremp, en terrenos situados entre 700 y 950 m de altitud, se plantaron 104 hectáreas con vides de las variedades Cabernet Franc, Chardonnay, Merlot y Pinot Noir, que desde hace bastantes años están en plena producción y estudio.



 Turritela negre y Turritela rosat

Las optimistas expectativas del proyecto vitivinícola del Grupo Torres rápidamente se contagiaron y algunos propietarios de la Conca de Tremp empezaron a imitar su ejemplo, sustituyendo algunos cultivos de secano por vides. Fue, precisamente, hacia el año 2000 cuando la familia Carmona-Bardella inicia la recuperación vitícola de la vieja finca familiar de Figols, situada en terreno solano y a unos 600 m. de altitud, plantando 10 ha. con vides de la variedad Merlot. Hasta el año 2012 la totalidad de la producción de uva de los viñedos de la finca del Pla de Nascala, en Figols de Tremp, era adquirida por la importante empresa vitivinícola Torres. Siendo a partir de esa fecha cuando la joven enóloga Eva Carmona, comienza a materializar el proyecto de elaborar sus propios vinos, bajo sus propias marcas: con el nombre de "El Vinyer" como empresa y con el nombre de Turritela para sus primeros vinos, reservando una parte de la producción de uva de la viña familiar.

El Turritela Negre 2014 fue el primer vino de la serie de vinos acogidos bajo esta particular denominación paleontológica, alusiva a una clase de caracolas fósiles denominadas turritelas, que produjo la bodega El Vinyer, empezando a embotellarse y a darse a conocer al público, en feries, redes y prensa, a partir de finales de la primavera del 2015. 
Como ya se ha mencionado anteriormente fue bautizado con el nombre común del género de fósiles que fueron escogidos por la productora como emblema indicador de procedencia geográfica y de la referencia a la cosecha o añada de su contenido liquido.
A finales del verano de 2016, ya ha aparecido el vino de la última añada, denominado Turritela Negre 2015.

 
El vino es elaborado en la bodega existente en la finca vitícola familiar del Pla de Nascala, en el término de Figols de Tremp, con uva negra de la variedad Merlot, vendimiada a mano en el punto óptimo de maduración. Inmediatamente es prensada y el mosto resultante transformado siguiendo las técnicas más modernas de fermentación, en tanques de acero inoxidable, seguido de un breve reposo en toneles de madera, antes del embotellado en recipientes de vidrio de 75 cl. Su graduación alcohólica es bastante elevada: 14,5 % vol. (14,5º).
Como ya se ha dicho este vino pertenece a la Denominación de Origen: "Costers del Segre".
Dice Jaume Aguadé, un entendido en materia enológica, que "Es un merlot joven -aunque una pequeña parte del vino haya pasado por tonel-, de color rojo vivo, fresco y afrutado de gusto. La uva debe de haber sido vendimiada en su momento exacto de sazón, porque el vino tiene un carácter franco que invita a beber, y es de sabor agradable, sin complicaciones, sencillo y limpio."


Aspecto de las etiquetas del vino Turritela de las variedades Negre 2015 (arriba derecha) y Rosat 2015 (abajo izquierda) extendidas. Si estuvieran adheridas sobre la botella, su parte central, se correspondería con la etiqueta frontal o anterior y sus laterales derecho e izquierdo, se corresponderían con la etiqueta posterior. Destacan claramente el nombre del vino, el logo con el fósil emblemático y el tipo de uva. El marco atigrado que hace de fondo, con sus colores y tonalidades alude visualmente de forma rápida a la variedad de vino que contiene: tinta, "negre" o rosada "rosat", en catalán.
Imágenes: Cortesía de Eva Carmona

El Turritela Rosat 2014 fue el segundo vino de la serie Turritela, de "El Vinyer", también 
elaborado con uva de la variedad Merlot, cultivada en la finca familiar, conseguido mediante un proceso de vinificación muy semejante al ya citado. Empezando a ser embotellado, en recipientes de vidrio de 75 cl., y promocionado en ferias, redes y prensa, a principios del verano del 2015. Su graduación alcohólica es bastante elevada: 14,5 % vol. (14,5º).
A finales del verano de 2016, ya ha aparecido en los mercados especializados el vino de la última añada, denominado Turritela Rosat 2015.


Justificación en la elección del nombre del vino y en el uso del logo paleontológico en la etiqueta


Las 10 ha, de viñedos de la familia Carmona-Bardella y sede de "El Vinyer" se hallan ubicadas dentro de una de las Geozonas del Inventario de Espacios de Interés Geológico en Cataluña, la nº 123, que está situada entre las localidades de Claret y del Coll de Montllobar. En ella se pueden reconocer diferentes indicadores geológicos y paleontológicos que definen el Estratotipo Ilerdiense o Ilerdiano por eso se considera que puede prestar interesantes servicios de Geoturismo con repercusiones económicas en la población local. Los terrenos de viñedos de la familia Carmona-Bardella y de "El Vinyer" están situados, concretamente, entre los Geótopos nº 3 (Serrat de la Perdiu o Collada de les Caragolines) y nº 4 (Llau de Xiroi).

 Mapa topográfico del ICGC, a escala 1/50.000, con la delimitación de la Geozona 123 y la situación de los 7 Geótopos, (todos trazados en color rojo), distribuidos junto al trazado de la carretera comarcal C-1311, que une las localidades de Puente de Montañana (Aragón) y Tremp (Cataluña). El orden de la numeración de los Geótopos empieza por la derecha y como ya se ha dicho los viñedos de la familia Carmona-Bardella están situados entre el nº 3 y el nº 4, junto y más abajo del trazado de la citada carretera.
Imagen: ZID 06. Ayuntamiento de Tremp

 

Yendo por la carretera comarcal C-1311 habiendo salido desde Tremp en dirección hacia Puente de Montañana, hacia el punto kilométrico 19,5 y bastante antes de llegar al pueblecito de Fígols, desde la carretera se pueden divisar junto a su lado sur unos extensos y cuidados viñedos que rodean un edificio con fachadas de piedra amarillenta y cubierta de teja, a dos aguas, en el que si se solicitan previamente se puede disfrutar de algunos servicios de enoturismo o comprar vino, y también un edificio con aspecto de almacén agrícola que es donde se realiza todo el proceso de transformación de la uva. El lugar resulta muy agradable a la vista y se le conoce como Las Viñas del Pla de Nascala. El conjunto se encuentra situado entre los 575 y los 625 metros de altitud.



Ortofoto del ICGC, a escala 1/5.000, en la parte central de la que se pueden apreciar las diversas parcelas de viñedos de la familia Carmona-Bardella y "El Vinyer", cuyo límite superior se ajusta al trazado de la carretera comarcal C-1311, que puede reconocerse en la parte superior de la imagen. Justamente en la parte derecha transcurre sobre la zona denominada "collada de les caragolines" por l@s paisan@s.
Imagen: Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya


Toda esta zona es muy rica en "micro" y "macro" fósiles, cuya presencia, abundancia, distribución y estudio les sirve a los geólogos y paleontólogos para conocer mejor la historias de la Tierra y de la Vida, así como para conocer la evolución de la geografía en sus aspectos climáticos, paisagísticos, faunísticos y florísticos. Además constituyen una parte del Patrimonio Natural característico de los territorios y de las sociedades en ellos establecidas, habiendo pasado algunos tipos de fósiles a formar parte de su cultura cotidiana, inspirando ciertos usos, costumbres o tradiciones. Conjunto de razones objetivas por las que está prohibido recoger fósiles sin autorización expresa de la autoridad pertinente.

Poco antes de llegar a la finca de la familia Carmona-Bardella la carretera transcurre por una zona denominada tradicionalmente, desde hace décadas, por la gente del país: "Collada de les Caragolines" (aunque en la cartografía y bibliografía generalmente aparece como "Collada de les Cargolines"), debido a la extraordinaria abundancia de restos fósiles de incontables turritelas fósiles. 














Mapa topográfico del ICGC, a escala 1/50.000, en el que aparece registrado y localizado el topónimo popular de motivación paleontológica "Collada de les Cargolines" que identifica un lugar del término de Tremp i del Pallars Jussà.
Imagen: Institut Cartogràfic i Geològic de Catalunya


Se trata de un tipo de esveltas caracolillas marinas prehistóricas, testimonios de cuando, durante el Eoceno, este territorio era el fondo de una cuenca marina, fósiles a los que la gente del país denominaba "Caragolines petrificades" debido al aspecto de su concha, vagamente semejante al de la de los caracoles del género Rumina decollata y a la naturaleza de su aspecto y estado, pétreos.  

Aspecto de una concha actual, vacía y limpia, de Rumina decollata vista con dos perspectivas distintas. Puede verse que guarda un cierto grado de semejanza, con la concha de las turritelas.
Las personas con conocimientos naturalistas, ya en el siglo XIX, reconocieron en algunas de las conchas fosilizadas más alargadas ciertos caracteres que les permitieron identificarlas como una especie de turritelas, es decir "torrecillas". Los actuales paleontólogos especialistas en gasterópodos fósiles, han llegado a reconocer y diferenciar ciertas características que les han permitido conseguir identificaciones mucho más precisas, alcanzando niveles de precisión específica y subespecífica. Así resultaría que las familiares "caragolines petrificades" de los paisanos de la Conca de Tremp y las turritelas de los naturalistas del siglo XIX, desde una perspectiva científica, mucho más precisa y acertada, pertenecen a las especies fósiles: Turritella trempina, sinónimo de Turritella dixoni, que es la especie mayoritária en el yacimiento de la "Collada de les Caragolines, acompañada de "Turritella figolina y Turritella dixoni figolina, salvo error u omisión. 

Aspecto de tres ejemplares de Turritella dixoni (T. trempina), procedentes de un yacimiento de la localidad francesa de Coustoge, en todo semejantes a las que se hallan en la Conca de Tremp. Expuestos en la Sección de Paleontología del Musée de Villeneuve-Minervois
Imagen: Album de fossiles


Fueron precisamente las humildes e incontables caracolillas marinas fósiles que aparecen en el suelo de sus viñas las que, en su día, inspiraron a Eva Carmona el nombre de sus dos primeros vinos: Turritela Negre y Turritela Rosat. Por lo tanto estos dos nuevos vinos catalanes, y más concretamente vinos pallareses, con un nombre paleontológico muy concreto y bien justificado, paleontologicamente, son los únicos casos españoles, de paleonto-vinos conocidos, hasta ese momento, por quien escribe y los únicos que merecen verdaderamente la denominación de "paleonto-vinos" verdaderos. En todos los demás casos de vinos paleontológicos españoles que han sido presentados en este blog, la vinculación de la botella o de su contenido con el registro fósil local era muy inconsistente por imprecisa y por genérica, o estaba escasamente justificada por la lejanía geográfica de la referencia paleontológica o, en el peor de los casos, resultaba totalmente imaginaria y absolutamente injustificable. Pero a pesar de ello y dada la extrema escasez de este tipo de productos enológicos en España, este blog quiso reseñarlos y mostrarlos a sus seguidores y a los visitantes ocasionales que pudieran estar interesados por el tema.

Aspecto de cuatro ejemplares de Turritella figolina, procedentes de un yacimiento de la localidad francesa de Fabrezan, en todo semejantes a las que se hallan en la Conca de Tremp. Expuestos en la Sección de Paleontología del Musée de Villeneuve-Minervois
Imagen: Album de fossiles



Debemos felicitar a Eva Carmona Bardella y al equipo de "El Vinyer" por la certera elección del fósil emblemático, por la etiqueta de moderno diseño y agradable aspecto y por la elección de un nombre tan sonoro y apropiado para su vinos que escrito correctamente en catalán debería ser "Turritel·la".
También les felicitamos por la correcta fundamentación geológica y la acertada argumentación enológica de sus vinos, pues en su declaración de intenciones enológicas Eva decía:
"Los vinos de "El Vinyer", intentan transmitir tanto la cultura como el entorno, pallareses. Desde la geología hasta el habla, dan nombre a sus caldos, y la frescura y el potencial aromático de estos son un claro reflejo del terreno y el clima donde se cultivan las viñas."

Estamos a la espera de la próxima aparición de otro vino de "El Vinyer" denominado con el nombre de otra clase de fósiles de aquellos muchos de varias clases que contiene el suelo de sus viñas del Pla de Nascala, en Figols de Tremp.


Nota:

Los vinos o proyectos de vino, españoles, pretendidamente, relacionados con el registro fósil local por sus productores o asesores de imagen de marca que hasta ahora habían sido presentados y valorados en este blog, han sido los siguientes: Clos dels Fòssils (octubre de 2012), Lacrimus Rex (noviembre de 2012), Terra Fossil (diciembre de 2012), Milenario (diciembre de 2012), Memento I-III (julio de 2013) y Memento IV-VI (noviembre de 2013). A los que ahora se deberán añadir los dos vinos Turritela.

Como curiosidad o como novedad en el sector paleonto-enológico español, debe mencionarse que Clos dels Fòssils ha modificado de manera radical, su antigua etiqueta en las botellas de su ultima añada (2015). En la antigua figuraba un gran amonite dorado, que en su caso era un emblema paleontológico injustificable, dada la ubicación de sus viñas en terrenos miocenos, hecho que fue muy criticado desde este blog. El aspecto de la nueva etiqueta del vino Clos dels Fòssils no es tan hermoso, refinado, ni tan pretencioso como era su predecesora, aunque sigue conservando un símbolo paleontológico confuso en la rotulación de su nombre. 

Aspecto de la nueva/actual etiqueta del vino "clos dels fòssils" de la bodega Llopart.
Imagen: bodega Llopart

En la nueva etiqueta la letra "o" ha sido sustituida por una figura espiraliforme que recuerda la forma de un caracol o la de un amonita, pero que tal vez ha sido copiada de los antiguos mapas geológicos españoles, en los que este mismo símbolo se usaba para indicar la situación sobre el terreno de un yacimiento paleontológico, de cualquier clase de fósiles. La nueva etiqueta  puede verse en la imagen de la derecha.



Fuentes:

- Anónimo. EL VINYER. Denominació d’Origen Costers del Segre
- Anónimo. 2014. Bodega Castell d'Encus. Club Enofílico Verema
- Anónimo. 2016. Bodegas Torres augura vinos muy aromáticos y equilibrados en su informe de vendimia 2015. La Semana Vitivinícola, 04/01/2016
- Anónimo. Viñedo Sant Miquel. Torres Viñedos Catalunya - Aguadé Bover, Jaume. 2015. Novetats pallareses. Apunts d'Enografia de Catalunya. Vins de Catalunya, 27/11/2015
- Carmona Bardella, Eva. 2015-2016. El Vinyer Face Book
- Carmona Bardella, Eva. 2016. Comunicaciones personales del 03/10/2016 y del 07/10/2016
- Colomé, Silvia y Ferro, Lorena. 2013. El vino sube a la montaña
La Vanguardia, 22/10/2013
- De Renzí, M. 1996. La influencia de los factores tafonómicos y paleoecológicos en la distribución de los moluscos en el área tipo del Ilerdiense (Conca de Tremp, Cataluña, España). Revista Española de Paleontología, Nº Extraordinario
- Iglesias, Rocío. 2014. Recuperar la uva de nuestros ancestros: el reto de Torres. Esquire, 5/11/2014
- Martinell Callicó, Jordi. 1988. Els gasteròpodes fòssils. El Registre Fòssil. Enciclopèdia d'Historia Natural dels PP.CC., vol. 15. Enciclopèdia Catalana
- Molina, E., de Renzi, M.; Álvarez, G.. 1995. El Estratotipo del llerdiense y su registro fósil. XI Jornadas de Paleontología. (Eds. G. López, A. Obrador y E. Vicens)
- Rivas Casamajó, Gonzalo & Remacha Grau, Eduard. GEOZONA 123. ESTRATOTIP DE L´ILERDIÀ (CLARET - COLL DE MONTLLOBAR) INTERÈS I VALOR PATRIMONIAL. Fitxes Descriptives dels EIGC. Direcció General del Medi Natural. Generalitat de Catalunya.
- Sahuquillo, María R. 2008. El vino lleva mal el calentamiento. El País, 02/10/2008-


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